Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que me animé a escribir en este espacio. Mi vida ha tomado vuelcos sospechables. No hay nada impredecible. Es todo mágica continuación.
Empecé mi práctica profesional, lo que representa todo un hito en mi vida universitaria. Hago clases en un colegio cuico algo simpático, pero a la vez desagradable. Como en todo lugar la interacción es buena con algunos y francamente infartante con otros.
Me evado fumando la cosecha de abril y buscando amores pasajeros. Me siento feliz. Tengo nueva casa y vivo con gente que realmente vale la pena. Creo en la amistad, aunque esté algo desilusionado del comportamiento de personas que se decían tus incondicionales.
Hoy estoy con mi familia. comí empanadas de mariscos con queso. Me gusta eso. Es "Semana Santa" y mañana me voy a ver a mi abuelo.
Una sugerencia: No vean televisión este fin de semana, a menos que puedan sintonizar Jesucristo Supeestrella.
Dejo este inconexo relato despidiéndome.
Los quiero a todos.
